Las máquinas eléctricas necesitan de un campo magnético para funcionar. Igual que la corriente eléctrica necesita un circuito de material conductor (cobre o aluminio) por donde circular, el campo magnético también necesita un circuito de material ferromagnético por donde circular. Para saber cuantas espiras debe tener la bobina que induce el campo magnético, o que sección debe tener el circuito magnético etc. se hace necesario estudiar los circuitos magnéticos.
Para poder hacer este estudio tenemos que definir una nueva magnitud, la intensidad de campo magnético o excitación magnética H. Su valor viene dado por la siguiente fórmula: H= N·I/l, donde N es el número de espiras de la bobina inductora, I la corriente que circula por la misma y l la longitud de la bobina (del núcleo magnético donde está arrollada la bobina). La unidad de medida de la intensidad de campo mangétido es el amperio/metro (A/m).
A partir de la intensidad de campo, podemos calcular la inducción magnética mediante la fórmula B = μ·H, donde m es la permeabilidad magnética del material que se utiliza como núcleo de la bobina.
Como el flujo magnético es Φ = B·S, entonces podemos calcular el flujo: